Una web primero tiene que funcionar, luego ser bonita. Para que una página web funcione como es debido y logre los objetivos planteados a la hora de su desarrollo se debe prestar suma atención al equilibrio entre diseño y usabilidad.
La estética ayuda, pero no lo es todo.
Estamos acostumbrados a considerar que un buen diseño web es sinónimo de éxito. Creemos que poner online una página web atractiva desde el punto de vista de la estética nos garantizará mayores beneficios comerciales.
Es cierto que en lo que respecta a nuestra imagen de marca un diseño cuidado provoca una buena impresión en aquellas personas que visitan nuestra web, por lo tanto es una muy buena idea tener un sitio web perfectamente trabajado desde lo visual, siempre y cuando respetemos ciertas pautas.
Apenas 5 segundos, que tenemos para captar la atención y retener a quienes visitan nuestro sitio web. Pasado ese tiempo, si ellos no encuentran lo que están buscando se irán sin más.
De acuerdo a este y otros comportamientos largamente estudiados por las grandes empresas que hacen mediciones dentro del entorno digital estamos obligados a adecuar tanto forma y contenido para optimizar al máximo nuestro sitio en favor de retener a quienes lo visitan.
¿ Que es la usabilidad ?
Algunos autores la definen como “la disciplina que estudia la forma de diseñar Sitios Web para que los usuarios puedan interactuar con ellos de la forma más fácil, cómoda e intuitiva posible” . Dicho en forma sencilla es el arte de hacer un sitio web para facilitar a quien lo visita navegar por el mismo con fluidez encontrando el contenido sin esfuerzo.
No obstante eso no agota el tema usabilidad, es solo un acercamiento ya que esta disciplina abarca aspectos mucho más amplios y con mayor profundidad surgidos a base de estudios, estadísticas y datos tomados muchos de ellos en el momento de la interacción entre los usuarios y los sitios web.
Por qué es importante la usabilidad
La usabilidad cobra importancia en tanto concibamos nuestra página web como una herramienta que permita desarrollar nuestro negocio, se encuentre éste en internet o fuera de internet.
Ejemplos de objetivos:
- captar clientes
- conseguir suscriptores para nuestra newsletter.
- utilizar nuestra web para dar soporte a los clientes.
- publicar novedades de la empresa o de nuestros servicios.
- se un canal informativo sobre las novedades de nuestro sector.
- utilizar nuestro sitio web para obtener direcciones email para campañas de mailing.
Sea cual fuere el objetivo de nuestra web estamos obligados a desarrollar nuestro sitio de la mejor manera posible, del modo más profesional precisamente para lograr esos objetivos.
Hay términos medios pero también extremos y excepciones
Si bien es importante ese tan ansiado equilibrio entre diseño y usabilidad en ciertos casos y siempre dependiendo de los objetivos que persigamos con nuestra página web, podemos dejar que la balanza se incline hacia un lado o hacia el otro.
Por ejemplo, si nuestra web es la web de una agencia de diseño gráfico, o una empresa de publicidad que hace de la creatividad y de romper el molde sus banderas es lógico que dicha web ponga más foco en la estética y en el diseño que en la usabilidad.
El mismo ejemplo puede utilizarse para una web que promocione servicios de fotografía o video. En estos casos seguramente será mas sabio priorizar el impacto visual que dar mayor protagonismo a la usabilidad.
Por el contrario si la web es, por ejemplo, un sitio que ofrece cursos online y necesita captar suscriptores para los mismos, seguramente inclinará la balanza para el lado de la usabilidad puesto que cada persona que ingrese tiene “a golpe de vista” que encontrar la oferta educativa sin confusión, de forma sencilla a los efectos de que dicho visitante haga click y convierta su visita en una suscripción.
Lo mismo ocurre en los e commerce. Los grandes jugadores en este rubro, como Ebay, Amazon, Mercado Libre, AliExpress y algunos otros de menor talla poco se preocupan por el diseño, es más, sus páginas y portales web son bastante poco estéticos, sin embargo están milimétricamente optimizados para vender los productos que allí se promocionan.
Con estos ejemplos intentamos dejar en claro que la cuestión central de este artículo, el equilibrio entre diseño y usabilidad, no es algo estático, inmutable o palabra santa pues como todo lo relacionado a lo digital tiene matices, no hay una única verdad ni una fórmula infalible que pueda ser utilizada con resultados favorables para todos en toda ocasión.
Siempre la mejor forma de encarar el desarrollo de un sitio web es a partir del objetivo que con el mismo buscamos alcanzar. Una vez definido ese objetivo vendrá el tiempo de buscar este virtuoso equilibrio entre la usabilidad y el diseño.